El cuerpo humano es un cumulo de partes muy sensibles al contacto de todo tipo, por lo que puede que tu cuerpo esté pidiendo a gritos algunos masajes placenteros. Un buen masaje es bien recibido por cualquiera cuando sea y como sea, por lo que aprender cómo dar uno es una excelente idea para todos.
Si bien hay muchos sitios especializados para esto, no está de más practicar cómo dar estos masajes, tampoco cómo recibirlos por parte de nuestra pareja.
Cómo dar masajes placenteros
Los masajes placenteros tienen la capacidad de colocar de buen humor a todas las personas que los reciban, ya sean hombres o mujeres da lo mismo. Es por ello que aprender a darlos es una excelente oportunidad para avivar el fuego en las parejas.
Entonces para dar masajes placenteros hay que prestar atención primero, a cómo crear el ambiente ideal para ellos. Recordando que si no se está en un lugar cómodo y limpio, es muy poco probable que la excitación pueda llegar a su punto máximo.
- Estar en una habitación con la temperatura ideal: Ni frio, ni calor, la temperatura ideal para uno de estos masajes debe ser una cálida para permitir que los músculos se relajen.
- Que se escuche buena música: El oído también debe ser estimulado. Por lo que es bueno ambientar el lugar con música suave, canciones románticas o sonidos de la naturaleza como la lluvia o un riachuelo.
- Emplear un buen aceite: Los aceites son claves para este tipo de masajes. Puedes experimentar con aceites esenciales relajantes como la manzanilla o la naranja; hasta los estimulantes como la canela y el jengibre.
Masajes placenteros para el pene
Los masajes placenteros para el pene son un excelente opción para los preliminares, así que masajear con suavidad esta parte es lo mejor que se puede hacer para obtener relaciones sexuales mucho más satisfactorias en general.
Videos masajes placenteros
Si se desea saber más sobre esto, lo mejor es recurrir a los videos de masajes placenteros para así poder aprender de estos.
Tipos de masajes placenteros
Hay muchos tipos de masajes placenteros, algunos gustarán más a algunos que otros, pero lo importante es encontrar aquellos que se adapten más a tus gustos. Hay masajes placenteros para los genitales masculinos y femeninos, pero también hay para los pies, las pantorillas, los glúteos y hasta la cabeza.
Como se ha mencionado, en todas partes del cuerpo hay un sitio para ser consentido.